Vivimos en una sociedad que esta a la vanguardia con la
transculturización, dejamos de lado nuestras costumbres espiritules y rituales
que nos definen como una cultura latina, pero si algo hemos olvidado es nuestra
cultura culinaria.
Permanecemos en una sociedad que convulsionada por el stress
de nuestros trabajos, nos arroja hacia el toxico mundo de la comida rápida, la
cual a la orden del día se presentan vanidosamente con lujo de oferta (muchas
promociones económicas en los diferentes restaurantes de comida rápida), la
demanda que existía en ya tiempos de antaño nos hace recordar los famosos fines
de semana en los cuales las familias salían a lugares como “los planes de
rendero”, “Apaneca” y la ahora llamada “Ruta de las Flores”. Recordamos ver la
aglomeración de gente que en hace unos años atrás visitaban esos lugares con
frecuencia, si bien es cierto la delincuencia que nuestro país enfrente día con
día nos hace guardar un voto de estancia perpetua en nuestras casas,
influenciada por una sensación
terrorífica de ser lastimado por nuestros mismos hermanos compatriotas, nos
hace pensar que los empolvados lugares de recreación ya no son muy frecuentados
por nuestra sociedad y así mismo sus establecimientos que ofrecían un bocado
lleno de cultura e historia.
Todavía existen lugares que ofrecen cultura culinaria
netamente Salvadoreña, asi mismo existen muchos lugares que dicen tenerla,
ofreciendo la hora salvadoreña de comida típica muy popular en ciertos lugares
como “Mister Donut”; a diferencia de ciertos lugares que ofrecen no una hora
típica sino un menú típico desde su hora de apertura de labores hasta su
cierre, tal es el caso de “típicos Margoth” la cual ofrece un amplio menú de
comidas típicas, tan culturales y de antaño que yo jamás había probado (el
soufle de elote, el pie de guineo con canela).
Pregunto a mi mismo en este momento porque tenemos que
cambiar una cultura culinaria tan llena de potencial, tan nostálgica y tan
casera por una cultura culinaria tan toxica y tan ajena a nosotros, comparto el
sentimiento salvadoreño de querer probar cosas nuevas y de vez en cuando esta
bien probarlas pero a nuestro criterio estaría bien poner en alto a nuestra
cultura culinaria tan llena de historia. Existen muchos lugares que todavía
guardan nuestra cultura culinaria de antaño y así mismo el privilegio de ser
deseado por la población con su clima tan frio y acogedor, así mismo por sus
lugares llenos de cultura e historia.
Hago la reflexión al lector sobre la necesidad de conocer mas los frutos de su tierra, hago la reflexión al lector sobre lo que esta enseñando a sus semejantes pues la trasculturizacion no tiene que absorber nuestros rituales culturales, así mismo no tiene que afectar nuestros hábitos alimenticios pues si bien es cierto los productos gastronómicos no son 100% saludables pero si tienen un alto contenido de carbohidratos que necesita el cuerpo, en cambio una hamburguesa puede tener mas calorías de las que tu piensas en tu mente.
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